miedo.

El cielo se quedaba pequeño cuando estaba a tu lado.
Las estrellas me las guardabas en los bolsillos cuando me besabas.
Cuando recuerdo cada conversación, cada sonrisa, cada beso, cada abrazo, cada caricia. Todos los momentos. Momentos en los que no son necesarias las palabras. Se respira amor. Huele a felicidad, Cuando todo eso me invade el cielo no se queda pequeño sino que desaparece directamente. Las estrellas se me espacan. Se me escapan como te me escapaste tú. Desaparecieron. Todas las noches las busco pero ellas no están. No sé si se esconden como haces tú. Por miedo. Al amor, a la felicidad. A aquello que sentias. O, talvez se hicieron polvo. Polvo de estrellas y están ahí, en nuestra escalera, espernándonos. Me gustaría ir ahí y buscarlas pero me da miedo por lo que pueda encontrar ahí. Porque sé que los momentos se me echarán encima y no sabré que hacer. Si, intento ser fuerte, pero la fuerza llega un momento en que no puede más y también se rinde. Lloraré como hago todas las noches.